Karl Staf

Karl Staf

Karl Staf falleció el 23 de Septiembre del 2008 en Helsingborg, Suecia. Hay muy pocas personas que han vivido una vida tan rica como él. La historia de Karl Staf se desarrolla a través del siglo pasado y alrededor de todo el mundo. Cuando tenía quince años fue militante de la Juventud Comunista en Suecia, y comunista se mantuvo durante toda su vida.

Nació en el año 1915 y muy joven se decidió por ser marinero, quería conocer el mundo. Cuando la guerra contra el fascismo empezó en España en 1936, se enroló en las Brigadas Internacionales. Durante la guerra fue telegrafista y tiró líneas detrás de las tropas enemigas. Participó en la batalla del Ebro y fue herido en Gandesa.

Durante la Segunda Guerra Mundial Karl Staf participó en el grupo de Wollweber en Suecia, un grupo que organizaba la resistencia contra el nazismo. En Noruega realizaron varios atentados, en Suecia el grupo fue arrestado. Pero Karl Staf escapó de la cárcel y se fue a Dinamarca a continuar la lucha. Alli fue traicionado, fue arrestado por la Gestapo y encarcelado ocho meses en la celda de la muerte. Fue indultado, y mandado un campo de concentración en Alemania hasta final de la Guerra.

En el año 1951 Karl Staf se fue a Moscú como corresponsal del diario del Partido Comunista en Suecia, y vivió en la URSS hasta 1959. Después trabajó en Pekin durante la revolución cultural, y escribió un libro muy crítico con el maoismo. Karl Staf vivió mas de 30 años en La Habana, Cuba, y trabajó muchos años para Prensa Latina. Los ultimos años de su vida vivió en su ciudad natal, Helsingborg.

En el año 1996 estuvo con los otros brigadistas internacionales en España, para obtener la nacionalidad española. Yo lo encontré la primera vez al comienzo de los ochenta, y le entrevisté para el libro «La Causa de España fue nuestra», sobre los brigadistas suecos. La ultima vez que me encontré con él fue en el otoño de 2005, entonces vivía solo y no le gustaba envejecer. «Me gustaría estar donde pasan las cosas», decía. «Ahora tengo que conformarme con ver todo lo que pasa a través de la televisión». Me opuse y le dije que él había vivido importantes episodios históricos. «Sí», admitió él, «los he vivido». Karl Staf fue el último de los brigadistas suecos.

Escrito por Kerstin Gustafsson Figueroa, hija de brigadista.