Una visión de los primeros días de la Batalla de Brunete en el sector del V Cuerpo de Ejército

 El porqué de la ofensiva de Brunete

Textos a partir del libro Soy del Quinto Regimiento, de Juan Modesto

… “A partir de marzo de 1937 el enemigo puso rumbo a la realización de la campaña del Norte, el acontecimiento más sobresaliente del período abril–septiembre de este año… Las fuerzas de maniobra del Ejército franquista… comenzaron la ofensiva el 31 de marzo. Esta, en su desarrollo cobraría el carácter de una verdadera guerra total, bombardeando y arrasando el adversario poblaciones pacíficas alejadas del frente y que no constituían ningún objetivo militar. La aviación nazi… redujo salvajemente a ruinas y cenizas, entre otras, las villas de Durango y Guernica, santuario del pueblo vasco, causando millares de muertos y heridos entre la población civil. La heroica pero desorganizada resistencia de las milicias vascas, carentes además de medios suficientes para contrarrestar la tempestad de hierro y fuego que caía sobre ellas desde el aire, el mar y la tierra, no pudo contener el avance de enemigo, que entró en Bilbao el 19 de junio, mes y medio después de empezada la ofensiva.

…Después de la ocupación de Bilbao, el enemigo seguía manteniendo allí el grueso de su Ejército y se aprestaba a proseguir sus acciones para liquidar el Norte. La República debía hacer cuanto pudiera para impedirlo. Esto motivó la primera operación ofensiva del Ejército Popular, conocida con el nombre de Batalla de Brunete, que se desarrolló en el mes de julio de 1937.

Se eligió el frente del Centro porque éste reunía las condiciones de urgencia y efectividad que el Norte necesitaba. En Madrid estaban las reservas constituidas después de Guadalajara, con las que se habían creado dos grades unidades de maniobra (primero el V Cuerpo, a mí encomendado, y luego el XVIII, al mando del teniente coronel Jurado), con las brigadas y batallones de mayor experiencia combativa que habían intervenido en todas las batallas libradas en el curso de la guerra y tenían la moral de la victoria defensiva que culminó en el Jarama y en Guadalajara, imponiendo al enemigo el abandono de sus planes iniciales.

…En el frente del Centro estaba, asimismo, el objetivo vital sobre que golpear para que la ayuda al Norte fuera efectiva. Ese objetivo eran las tropas que asediaban a Madrid. Por añadidura, también era vital para nosotros alejar a esas tropas de las inmediaciones de la Capital. [1]

La operación de Brunete era, por su carácter, una acción de cooperación operativa de frentes: el de Madrid con el del Norte. Perseguía como objetivo principal (estratégico) detener la ofensiva enemiga en el Norte, a fin de hacer ganar tiempo a nuestras fuerzas para el mejoramiento de sus defensas, la organización y el complemento de sus unidades desgastadas y la máxima movilización de los recursos locales. Su objetivo operativo era, como queda dicho, alejar al enemigo de las proximidades de Madrid.

Para alcanzar los objetivos propuestos, lo decisivo era el ritmo en la ejecución, aprovechando la su­perioridad inicial sobre el enemigo. Catorce brigadas, apoyadas por 54 cañones y 90 ingenios blindados, cuatro escuadrones de caballería, con la cooperación de 140 aviones (50 Katiuskas de bombardeo, 40 Moscas y 50 Chatos de caza), atacarían desde el Noroeste de Madrid en la dirección general de Brunete y más al Sur. Cuatro brigadas, con el apoyo de 27 cañones y 40 tanques, lo harían, a su vez, en dirección Oeste sobre Carabanchel Alto.

El plan de la maniobra

El V Cuerpo -con las divisiones 11, 46 y 35- y el XVIII Cuerpo -con las divisiones 10, 15 y 34­-… romperían el frente enemigo en dirección Sur, entre Navalagamella y Villanueva del Pardillo, avanzando y liberando Quijorna, Villanueva de la Cañada y Brunete. Su avance posterior proseguiría hacia el Este, con el fin de establecer pasos sobre el río Guadarrama en las direcciones de Villaviciosa de Odón y Boadilla del Monte. El flanco abierto de las fuerzas que actuaban en esta dirección lo aseguraría el V Cuerpo.

Los Cuerpos V y XVIII deberían intentar establecer enlace de fuego con las unidades del II, cuyas brigadas 41 y 42 en primer escalón tenían la misión de romper el frente enemigo entre Villaverde y el Basurero, conquistar ambos, abriendo paso a las brigadas 19 y 17 que, avanzando sobre Carabanchel Alto y luego hacia Alcorcón, buscarían en este último punto el enlace con las unidades del XVIII Cuerpo.

…Una brigada de la 11 división [la 100]… y la 10 brigada (que mandaba Policarpo Candón) de la 46 división, cuyo jefe era Valentín González «El Campesino», saldrían de su lugar de concentración a las 22 horas a fin de ocupar las bases de partida para su acción. Esta debería dar comienzo a las 24 horas. Las dos brigadas acodadas tenían la misión de penetrar en la retaguardia enemiga por los intervalos existentes en su defensa y, al pisar el camino de Quijorna a Villanueva de la Cañada, la 10 brigada proseguiría hacia Quijorna, mientras la brigada de la 11 división continuaría hacia Brunete.

La brigada 101 (que mandaba Merino), también de la 46, rodearía con uno de sus batallones el Cerro de los Llanos y con las fuerzas restantes atacaría las posiciones enemigas existentes al Este del río Perales… y aseguraría el flanco derecho del Cuerpo. Las fuerzas que marchaban sobre los Llanos, Quijorna y Brunete ocuparían posiciones idóneas próximas a sus objetivos, para con las luces del alba asaltarlos y conquistarlos.

La ejecución de la maniobra ofensiva

 

 

 

A las 5 horas del día 6 de julio, las fuerzas del primer escalón del V Cuerpo, esto es, las divisiones 11 y 46, se encontraban ante sus objetivos: las unidades de la 11, cercando Brunete, que conquistaron al primer golpe, sin bajas. En cuanto a las de la 46, su brigada 101 había arrollado las posiciones enemigas en su sector de acción y salido a la orilla Este del Perales. La otra brigada de la 46, la 10, había salido ante Quijorna, pero sólo con dos de sus batallones… El jefe de la 46 división había modificado las órdenes recibidas en el sentido siguiente: la misión de cerco del Cerro que corona el vértice Llanos se la encomendó a un batallón de la 10 brigada, mandado por Domiciano Leal, en vez de dársela a uno de la 101, como yo había indicado. Con esto disminuyó la fuerza de choque y la capacidad de maniobra de aquélla, pues sólo atacaban Quijorna dos batallones.

…Ya vencida la jornada del 7, el batallón de la 10 brigada que mandaba Domiciano Leal conquistó en el tercer ataque que realizó el macizo que corona Los Llanos, haciendo un centenar de prisioneros marroquíes. Otros se suicidaron dándose el tiro de vientre, clásico en ellos.

…Las demás unidades del V Cuerpo no modificaron la situación en sus acciones de los días 7 y 8. Quijorna siguió resis­tiendo y al final del 7 reforzó el enemigo su defensa con un nuevo batallón. Tampoco los ataques del día 8 lograron sus objetivos.

…Entre los días 9–13 de julio… prosiguieron los combates que ilustran el último periodo ofensivo de la operación de Brunete… Sus episodios combativos más destacados fueron: en el sector del V Cuerpo, la toma de Quijorna, el día 9, por la 10 brigada, reforzada con dos escuadrones de caballería y con la colaboración de un batallón de la 11 brigada que sostenía el ataque de la 10 desde el día anterior”.

[1]  Como nos ha indicado Alberto Losada, ese objetivo fue el acometido en la 2ª batalla de Madrid (más conocida como la Operación Garabitas, abril de 1937). En ella participaron diversas unidades republicanas (mandadas por Líster, Perea y otros). La acción más cercana a Madrid, fue la emprendida por la 2ª Brigada Mixta, mandada por el Comandante Jesús Martínez de Aragón, (muerto el día de su comienzo, el día 9).