Giordano Starnini. Un valentanés, héroe de dos mundos

Hace dos meses nos escribió desde Italia Fabrizio Mancini. Quería información sobre un paisano suo de Valentano y le dimo la que teníamos. El resultado ha sido un artículo que Fabricio ha publicado en la prensa local y que nosotros publicamos ahora. Más importante aún es el proyecto de convertir esta primera búsqueda en una tesis doctoral. Te animamos Fabricio. ¡Adelante!

Valentano y Morata de Tajuña están «solo» a 1.881 km de distancia y un hilo conductor los une. Pero demos un paso atras. Nuestra historia comienza el 23 de diciembre de 1907, cuando a las seis de la mañana nace en Valentano Giordano Bruno Nolano Starnini, hijo de Cesare Starnini y Domenica Rosati. Giordano, con un nombre tan impetuoso (Giordano Bruno, llamado el Nolano, fue un filosofo quemado por la Inquisicion por su teorías cosmológicas), ciertamente no podría llevar una vida tranquila. Adoptando las ideas socialistas, el joven Starnini emigró a Troyes, en Francia, con su tío Oreste, donde trabajó como zapatero y asistió a un club católico. El vínculo (la relación) con su tío será tan fuerte que Giordano será adoptado por este último como hijo.

Al igual que Giordano, también su tío y padre adoptivo, Oreste Donati, estaba vinculado al partido socialista: en los años de la ocupación nazi militó en la resistencia francesa (Maquis), ganando la Medalla de Oro por sus hazañas. En el 1932 Starnini ,encabezó una manifestacion contra el Cónsul italiano, con ocasión de la inaguracion de “la casa degli italiani”, por eso fue arestado y expulsado a Bélgica, donde mantuvo contactos con el Partido Socialista. Más tarde regresó al territorio francés donde difundió el el diario “L’Avanti” (diario socialista italiano) y militó en el LIDU (Lega Italiana dei Diritti dell’Uomo, Liga Italiana Derechos Humanos) que desde 1923 se había trasladado a París dado el ambiente hostil creado en Italia por el fascismo

Mientras Starnini se agitaba en Francia, la situación política en España estaba en crisis: en 1931 se formó la Segunda República con el exilio voluntario del rey Alfonso XIII. Después de un período de dos años de poder socialista marcado por políticas antirreligiosas (a menudo violentas) y reformas agrarias, el gobierno pasó a manos de la derecha que comenzó a suspender parte de las reformas iniciadas por la izquierda: esto provocó el descontento de las clases trabajadoras, estallaron muchos disturbios, entre los cuales destaca, por su violencia, la revolución de Asturias en 1934, severamente reprimida por el gobierno central de Madrid.

Después de una serie de crisis gubernamentales, el poder pasó en febrero de 1936 a manos del Frente Popular; pero la situación era muy complicada: muchos partidarios del nuevo poder gobernante atacaron iglesias y grandes propiedades privadas, ocurrieron enfrentamientos entre falangistas y trabajadores y entre socialistas y anarquistas. Esta situación caótica favoreció el golpe organizado del general Francisco Franco que inició la campaña militar contra la República desde Marruecos. Franco, además del apoyo de una gran parte del ejército, pudo contar con la ayuda militar y económica de la Italia fascista y la Alemania nazi, que podían experimentar la violencia destructiva de sus armas en el territorio ibérico, las misma que en los años siguientes ensangrentarían a Europa y al África. En cambio, la República solo pudo contar con el apoyo de la abrumadora mayoría de la población española y voluntarios antifascistas de todo el mundo.

Así se formaron las Brigadas Internacionales: 59.000 voluntarios de diferentes nacionalidades vinieron a España para detener el avance de los franquistas. Incluso combatientes italianos se presentaron en el territorio ibérico: entre los 4050 brigadistas italianos se destaca la presencia del valentanese Giordano Starnini. Starnini declaró en 1937: «No hice el servicio militar, pero soy joven; en buena salud y tengo nociones de química. Con un mes de educación militar, puedo convertirme en un buen soldado como otros voluntarios. Déjemne ir «

Llegado a España, en enero de 1937 se unió a la XV Brigada Internacional, batallón Dimitrov. La composición nacional de los combatientes de la Brigada era mixta: británica, estadounidense, canadiense, yugoslava, griega e italiana… con un total de 26 nacionalidades diferentes. El bautismo de fuego de la Brigada se llevó a cabo el mes siguiente. A pesar de la falta de preparación, la XV Brigada fue enviada en febrero de 1937 para detener el avance franquista destinado a conquistar la capital española, Madrid. La batalla que siguió, la batalla de Jarama (del 6 al 27 de febrero), fue uno de los capítulos más sangrientos de la Guerra Civil: sumando las pérdidas de ambos bandos llegó a unos 20.000 muertos, heridos y prisioneros. La batalla fue favorable a el bando republicano: una victoria estratégica que detuvo el avance nacionalista. El mes siguiente, en Guadalajara, se vio otra batalla violenta al enfrentarse unidades italianas (fascistas) contra otros italianos: una guerra civil dentro de otra guerra civil.

La batalla de Guadalajara salió como una de las pocas victorias republicanas sobre el ejército invasor. Para celebrar la victoria, los republicanos reanudaron y modificaron con un texto irónico la canción «Faccetta Nera» (“Carita Negra” una de las canciones fascistas italianas mas populares y posteriormente prohibida porque exaltaba la “raza negra”). Así lo hicieron también los fascistas españoles para ridiculizar a los italianos derrotados por sus compatriotas, soldados de un ejército de voluntarios.

Giordano Starnini no participó en la batalla de Guadalajara, pero para los italianos este enfrentamiento fue particularmente significativo. La vida de Starnini Jordan terminó el el día 5 de abril de 1937. Pietro Nenni, futuro vicepresidente del Consejo de la República Italiana y uno de los líderes mas importantes del antifascismo italiano, escribirá una carta a la familia para comunicar la muerte del luchador (tengo una copia de la carta), mientras estaba de guardia cerca de Morata de Tajuña. Fue enterrado en el cementerio de la localidad, pero una vez terminada la guerra en 1939, Franco suprimió de los cementerios las tumbas de los republicanos, arrojando los restos en fosas comunes.

En 2004 se erigió una placa conmemorativa en la fosa común de los voluntarios republicanos en el cementerio de Morata de Tajuña, pero como dijo Juan Paredes Manot: «Mañana Cuando yo muera, no me vengais a llorar. Nunca estaré bajo tierra. Soy viento de libertad”.

Quiero hacer público mi agradecimento a la Asociación de Amigos de las Brigadas Internacionales (AABI) por la ayuda y la paciencia que me ha prestado para llevar a cabo este artículo.

“Héroe de los dos mundos”era el apodo de Garibaldi por luchar en América Latina e Italia. La mayoria de los italianos voluntarios en la Guerra Civil lucharon en el batellón Garibaldi.