VII Marcha del Jarama

Muireann Hickey (centro de la foto) y otros participantes escuchan la canción de Manus O’Riordan al comienzo de la marcha del Jarama ante el memorial de Charlie Donnelly 

Este sábado 22 de febrero se ha celebrado esta marcha dedicada a la XII BI y que año tras año va adquiriendo una dimensión mayor. Arrancó a las 9:30 junto al monumento de Charlie Donnelly (parque de Miralrío en Rivas-Vaciamadrid) con una canción de Manus O’Riordan dedicada a los voluntarios irlandeses.

alt

Foto de Óscar Rodríguez

De allí bajó el grupo hasta el histórico puente de Arganda, donde el profesor Marco Puppini, de AICVAS, explicó la formidable defensa protagonizada por el batallón Garibaldi en esa zona del valle del Jarama. Allí, sobre ese río que bajaba con fuerza tras los sucesivos temporales de lluvia, cantamos el Jarama Valley, recordando también al gran Pete Seeger, que contribuyó a hacer legendaria la lucha de aquel mes y de aquellos años.

El segundo tramo de la marcha consistía en avanzar hacia las colinas de Pajares, testigos de la heroica defensa que el batallón André Marty hizo en aquellos parajes el día 11 de febrero de 1937. Tras dos km y medio llegamos a un observatorio extraordinario: el puesto de mando del coronel franquista Barrón. Desde allí se divisaba una panorámica increíble del valle del Jarama y de los altos de La Marañosa hasta La Poveda y las colinas de Valdeperdices, tras las cuales se adivina la población de Arganda. Fue en ese punto donde David Loriente explicó, con el acierto que le caracteriza, los pormenores de la lucha de la XII, y también de la XI BI, en aquellos duros días que tantas vidas segó.

Foto de Bern Kolter

A las 13:30 estábamos todos concentrados junto al gran monumento de Martín Chirino. El ambiente era totalmente festivo. El sol brillaba sobre el valle del Tajuña. La música reverberaba en la colina atrincherada donde se ubica el monumento y las viandas aportadas por los compañeros de la agrupación comunista de Getafe contribuían a crear ese ambiente de fiesta popular que protagonizaban los casi 500 participantes al acto.

Luego se hizo el silencio y cantamos el hermoso  Himno de la XII BI. A su término, recordamos a los brigadistas que aún viven, como también a nuestro querido amigo el veterano Juan Antonio Mayoral, al que una enfermedad le ha impedido este año acudir a la cita a la que nunca faltó. También reconocimos la presencia de Luz Alonso, joven republicana en aquellos años de la guerra que sigue viniendo, año tras año, con sus hijas, sus nietos y su amiga Manoli.

Foto de Óscar Rodríguez

Tras las breves y emotivas palabras de Marco Pupini, los compañeros socialistas de Morata colocaron, como vienen haciendo todos los años, una corona de recuerdo a los héroes del Jarama, los españoles y los internacionales. Y a continuación, tras un minuto de silencio, volvió a sonar el himno de la lucha y la solidaridad internacional de los trabajadores del mundo; ese himno que se oyó cantar por esos mismos parajes en la tarde del 14 de febrero, cuando los voluntarios, tras un momento de desfallecimiento, fueron reagrupados por Frank Ryan y Jock Cunningham y volvieron al frente para repeler el avance que los fascistas habían efectuado por la mañana.

Eran ya las 3 cuando comenzó la comida fraternal en el Mesón el Cid, seguida por una sobremesa musical en la que José Manuel Noriega intercaló, entre parlamentos y parlamentos, las vibrantes canciones de aquellos años. 

Y así, con un día intenso bajo un sol magnífico, acabó a las 7 de la tarde la 7ª marcha del Jarama.

Gracias a todos los que los que participaron, incluidos los compañeros que vinieron de Francia, Italia, Alemania y sobre todo a los 80 británicos e irlandeses. Gracias a los que ayudaron a hacerla posible, entre otros a Goyo Salcedo y Pilar Atance por abrirnos las puertas del Museo de la batalla del Jarama. Gracias a Carl Melchor por su magnífico vídeo, y a

Bern KolterÓscar Rodríguez Damián Coello  por sus emotivos reportajes.

Hasta el año que viene. Por la Tercera.