XV MARCHA MEMORIAL BATALLA DE BRUNETE
En el aparcamiento de la plaza de toros de Quijorna nos reunimos unos 50 compañeros para recorrer la que ha sido la más difícil de la marcha en lo referido a cuanto la dureza del camino a ascender.
Se trataba de alcanzar los altos de Los Llanos, punto que representó las defensas del flanco derecho del avance republicano desde el mismo día 6 de julio, y cuya toma en los primeros momentos fue muy complicada por la dura defensa que se produjo. La 101 Brigada Mixta, dirigida por el comandante Pablo Mateo Merino, debía haber comenzado el ataque antes del amanecer, pero lo complicado del recorrido nocturno hizo que ya hubiese algo de luz cuando éste se produjo. Posiblemente el primer disparo de la Batalla de Brunete se produjo en este punto.
El ascenso es complicado, por caminos bastante deteriorados por el agua, lo que supuso problemas para algunos de los componentes del grupo. Ernesto Viñas, de Brunete en la Memoria, fue el encargado de traernos los comentarios sobre los distintos puntos del recorrido y los hechos y los hitos que podíamos ver en el espectacular paisaje que se descubre desde esas alturas. Desde la AABI realizamos un añadido dedicado a esos voluntarios cubanos y su participación en la guerra. Cuba fue el país que más voluntarios aportó en proporción a su población, alcanzando unos 1200 voluntarios. Un paseo por la meseta que forman Los Llanos nos permitió contemplar toda la zona de los combates y las líneas de avance y la previsión de dirección del ataque republicano. En esa zona se instaló una batería de artillería después de la batalla, y durante nuestro paseo aparecieron varios de los protectores de baquelita que llevaban los percutores de su munición.
Contamos con la presencia de Javier y Alejandro, en representación de la Embajada Cubana, ya que nuestra intención era homenajear a los voluntarios cubanos que apoyaron a la República Española. En esa 101 Brigada luchaban varios de ellos, al igual que en la 10, laotra brigada que componía la 46 División de El Campesino, y que estaba mandada por el cubano Policarpo Candón, posteriormente muerto en Teruel. El capitán Julio Valdés Cofiño, y el teniente Alejandro Moltalbán, cubanos de esa 101 BM, caerían en las acciones en torno a los Llanos, y su valor es relatado por Pedro Matero Merino, en su libro Por nuestra libertad y la vuestra.