Julio 1938. Comienza la ofensiva del Ebro

La preparación de la ofensiva, tal como se describió en el post anterior (junio 38), continuó con mayor intensidad aún en las tres primeras semanas de julio. Alvah Bessie escribió esto en sus Cuadernos:

1 de julio: Lopoff… me mantiene en el puesto actual [como ayudante suyo] hasta que entremos en acción. Lo cual puede ser pronto: los rumores, constantes, hablan de asumir la ofensiva aquí en el frente del Ebro, cruzar el río (tendría que ser una acción ofensiva en cualquier caso) y tratar de llegar al frente de Levante…. Posiblemente, si tuviera éxito, una maniobra de 5 días… que podría significar días sin comida ni tabaco (ya no hay tabaco, desde hace una semana, de ningún tipo), sin comunicaciones ni retirada de los heridos… Se nos ha dicho que esperemos entrar en acción en cualquier momento, que estemos preparados para movernos en cualquier momento; que entrenemos como si cada día fuera nuestro último día de entrenamiento. El programa de entrenamiento es ahora intensivo, elaborado por la Brigada con varios días de anticipación y cubriendo todas las fases del trabajo de infantería: ejercicios de tiro, misión de reconocimiento militar, patrulla, exploración y contacto, Servicio de Seguridad, cruce de ríos”…

Sectores de actuación de los dos Cuerpos de Ejército que iniciaron la ofensiva del Ebro

La operación del Ebro iba a  desarrollarse en el espacio comprendido entre Mequinenza y Amposta. La dirección principal de ataque estaba en el centro de ambos puntos, en el tramo del río Ebro limitado al N. por el río Matarraña y al S. por el Canaletas. Completaban la maniobra otras dos direcciones en los flancos: una en el derecho, entre Mequinenza y Fayón, a cargo de la 226 brigada, y otra, en el izquierdo, a un kilómetro al N. de Amposta, a cargo de la XIV BI junto con la 139 BM. En principio iban a participar solo cuatro BI, ya que la XII fue relegada por Líster a vigilar la orilla izquierda del Ebro en la zona donde iba a actuar el V CE.

Sobre el desarrollo de estos acontecimientos hemos contado, sobre todo, con párrafos del libro Soy del Quinto Regimiento, de Juan Modesto, el Jefe del Ejército del Ebro. Casi todas las citas entrecomilladas corresponden al mismo. Como ampliación de la información, se puede contar con la proporcionada en un anterior artículo de nuestra web: Las BI en la batalla del Ebro. 1ª parte

“El Ejército del Ebro tenía la misión de constituir una cabeza de puente en la zona de Gandesa y, en caso favorable, proseguir sus acciones en dirección O. y SO. Si esto no era posible por la rapidez de la reacción del enemigo, ya que el forzamiento del río significaba una amenaza para su retaguardia, obligarle a retener sus reservas durante un mes, como mínimo, ante nuestras posiciones en la margen derecha del río. En ese plazo de tiempo, nuestras fuerzas de la zona Centro–Sur y del frente de Levante debían organizar una operación en dirección Catí”.

¿Qué papel iban a jugar las respectivas unidades internacionales?

”La preparación combativa, técnica y física había alcanzado un grado muy alto. La otra, la preparación política y moral, arma que suplía las insuficiencias, era la obra del Comisariado, desde el comisario de compañía hasta el del Ejército, pasando por el de batallón, brigada, división y cuerpo. …Cuando el día 19 de julio las unidades del Ejército del Ebro comenzaron a ponerse escalonadamente en movimiento a fin de ocupar las bases de partida para forzar el río, los combatientes, los mandos de escuadra, pelotón, sección, compañía, batallón y todos los demás teníamos una confianza absoluta en el éxito de lo operación. Y todo el mundo era consciente de las dificultades… En la noche del 22 al 23 de julio las unidades hicieron la última marcha y se situaron en las zonas de concentración para el forzamiento del paso”.

Hay cierta discrepancia, en las fechas, entre el relato de Modesto y las anotaciones que hizo Bessie en su Cuaderno nº 2:

“21 de julio: anoche salimos del campamento a las 12 de la noche, marchamos hasta el amanecer; a unos 3 km del Ebro, al noroeste de Falset. Marchamos de nuevo esta noche, unos 25 kilómetros, presumiblemente en una gran operación. Puede ser simplemente una maniobra táctica o un movimiento del ejército a gran escala; posible acción ofensiva en una escala mayor a ninguna anterior; puede que en el sur los fascistas hayan logrado una victoria importante y vayamos a iniciar una ofensiva para aliviar la presión…

23 de julio: salimos de la posición anterior a las 11:30, caminamos hasta el amanecer, 25 km, una marcha muy dura; pies muy doloridos. Ahora en un barranco… a unos 3 km del rio. El calor durante el día es tremendo; agotamiento y dolores musculares… Esta tarde nos enteramos de que cruzaremos el Ebro en las próximas 48 horas, puede que marchando esta noche, puede que mañana por la noche. En esta acción participará todo el Ejército del Ebro… El objetivo de la operación, destinada a aliviar la presión hacia el sur, es cruzar el Ebro y viajar de manera rápida y ligera, penetrar en territorio enemigo, mantener posiciones mientras otras tropas se acercan, construir puentes, etc.”

Primeros objetivos de las unidades internacionales

Voluntarios del batallón Mackenzie-Papineau cruzando el Ebro el 25 de julio de 1938

35 División:

Partiendo de la zona de Vinebre, la XI BI debía cruzar el rio al norte de Ascó, subir a la Fatarella, avanzar en dirección a Gandesa para finalmente atacarla desde el NO. Para esta última acción contaron con dos batallones de la XV BI (Lincoln y Spanish). La XIII BI cruzaría el Ebro al sur de Ascó y avanzaría hacia el nudo de Camposines, tomaría Corbera de Ebro y luego atacaría Gandesa desde el NE, con la ayuda de los otros dos batallones de la XV BI (British y Mackenzie Papineau), que enlazaría con las unidades del V V CE hacia la sierra de Pandols.

45 División:

Líster, jefe del V CE, decidió mantener la XII BI en la vigilancia de la línea del Ebro entre Cherta y Ginestar, mientras que empleaba la XIV BI como fuerza de choque para una acción secundaria sobre la zona de Amposta. Su misión consistía en impedir al enemigo localizar el sector donde el V CE iba a asestar el golpe principal.

Ejecución de las respectivas misiones

Llenos de optimismo, cada uno conociendo su misión, los combatientes de todas las armas, los equipos del batallón de marinos al pie de las barcas y los ingenieros con el material de puentes, esperaban la hora «H» (ya conocida), las 0,15 del 25 de julio de 1938, para acometer la maniobra…”

Voluntarios de la XIII BI avanzando hacia la toma de Corbera (25 de julio de 1938)

La 35 División cumplió con creces sus primeros objetivos: cruzar el Ebro y avanzar sobre Gandesa. La XIII BI, en vanguardia, sorprendió en Camposines,  a las 7,00, al jefe de aquel sector de la defensa y a su Estado Mayor. Rápidamente avanzó sobre Corbera y la tomó, mientras dos batallones de la XV BI fueron limpiando la zona del río Sec (entre la sierra de La Val de la Torre y las serrezuelas al SE de La Fatarella).

La XI BI, tras atacar Ascó, avanzó sobre Gandesa para situarse en condición de ataque a la ciudad. “Al final de la jornada, las unidades de la 35 división habían profundizado 25 km. en su avance, conquistando Corbera y estaban sobre Gandesa, que no pudieron tomar por falta de apoyo de artillería y tanques. Era la unidad que tenía aquella misión… La 35 hizo al enemigo centenares de prisioneros y cogió como trofeo un grupo de artillería de 75 mm a tracción mecánica, dos depósitos de intendencia en Venta de Camposines y Corbera y un parque de pontones pesados de fabricación extranjera”.

Mientras tanto, la XIV BI “comenzaba a las 0,15 horas el paso del río, a 500 metros al N. de Amposta. Únicamente el batallón Comuna de París, cuyo jefe era el comandante Cazala y el comisario, Francisco Parra, realizó el paso con éxito, sin que las otras unidades de la 14 lograran cruzar el río. El hecho de que se batiera solo y en terreno llano contra un enemigo sobre el que se había logrado la sorpresa muy parcialmente, unido a los contraataques enemigos protegidos con fuerte artillería, que dieron lugar a heroicos episodios de lucha y de resistencia en los que se llegó al cuerpo a cuerpo, me inclinó a ordenar el repliegue del batallón a sus bases de partida. Su jefe cayó heroicamente. Y el comisario, cumpliendo el lema de ‘el primero en avanzar y el último en retroceder’, cayó en el punto de paso organizando la retirada del batallón”.

El balance que Modesto hizo sobre esta primera fase de la ofensiva fue muy positivo:

La maniobra de forzamiento del río Ebro, en un frente de 80 km. de su recorrido; con dos agrupaciones de fuerzas separadas en sus puntos de partida por unos 40 kilómetros y con la misión de unirse a 25 y 20 kilómetros de penetración en la retaguardia enemiga, fue un éxito total. Se realizó por sorpresa en la primera jornada, sin preparación artillera y sin apoyo ni protección de la aviación, con escasísimos medios de paso y, por añadidura, las dificultades suplementarias creadas por la avenida que provocó el enemigo al tener en sus manos el régimen de aguas y la velocidad de la corriente, ya que todos los afluentes de gran o pequeño caudal, aguas arriba de Mequinenza, estaban en su poder. Se hicieron al enemigo 7.000 prisioneros y varias decenas de miles de muertos y heridos. Y se conquistó todo el territorio comprendido en el meandro del Ebro desde el Matarraña al Canaletas. Dentro de él estaba el sistema montañoso de las sierras Pandols, Caballs, Lavall de la Torre, Picaza y La Fatarella, posiciones todas de gran valor operativo y táctico por dominar el terreno circundante».

El fracaso del avance hacia el sur de Gandesa

Lo que no pudieron lograr los dos Cuerpos de Ejército empeñados fue proseguir su avance hacia el Sur, cuyo primer obstáculo era vencer el núcleo resistente de Gandesa:

Al proseguir su acción ofensiva en la mañana del 26, la 35 división tenía delante las divisiones 13 y 84, la última venida de Levante, que habían organizado la defensa de Gandesa, al N. y al NE. de la población, en posiciones fuertemente fortificadas y protegidas con alambradas. La 13 brigada siguió sus ataques durante toda la jornada en dirección S. avanzando ligeramente su flanco derecho. A su izquierda, la 15 brigada atacó Gandesa. Las acciones de la 35 división fueron frenadas por la actividad de las fuerzas enemigas… Los combates para tomar Gandesa prosiguieron en las jornadas siguientes, hasta el 3 de agosto en que pasamos a la defensiva. Para dar más cohesión a las fuerzas que atacaban la villa, al final del día 30 designé un solo mando circunstancial de las mismas, encargando a Merino, jefe de la 35 división, del sector Centro que se formó con ellas”. La misión de la 35 División era proseguir en sus ataques a Gsndesa. Pero… “ni el XV Cuerpo conquistó Gandesa, ni el V Cuerpo tomó Bot, aunque nuestras unidades alcanzaron sus puertas. Suspendimos la maniobra ofensiva y pasamos a la defensiva el día 3”.

Prosigue la retirada estratégica de la 129 BI

Voluntarios de la 129 BI en los combates de Teruel, batalla del Levante

Tras los combates en el vértice Monegros y posteriormente en Linares de Mora, la 129 BI pudo disfrutar, a principios de julio, de un pequeño descanso:

La 129 BI tuvo que ser reorganizada cerca de Rubielos de Mora, en el Batán, donde había agua abundante. Nuevas remesas de hombres, además de 400 interbrigadistas desbandados y de 50 artilleros, se entrenaban para esta unidad cerca de Valencia. Pero el enemigo no cejaba en sus ataques. La eficacia de sus servicios aéreos era impresionante. A lo largo del ferrocarril secundario de Teruel los convoyes de municiones incendiados entorpecían el tráfico. Sobre el campo atrincherado de Mora la artillería y la aviación bombardeaban sin descanso a las formaciones republicanas” (A. Castells. Las Brigadas Internacionales de España).

No faltaron pequeños combates en el flanco izquierdo (zona de Valbona), aunque el descanso terminó cuando la brigada recibió la orden de trasladarse a Cirat y a Sueras. Por aquel entonces Franco había decidido acelerar la caída de Valencia, para lo que contaba con cuatro Cuerpos de ejército (ver mapa más abajo).

Para frenar este último empujón de la ofensiva el Mando republicano organizó una línea defensiva, la XYZ, y se lanzaron algunas acciones para fortalecerla. Una de estas fue el ataque a  la Peña de Marco (al norte de Sueras, al Sur de Castellón) que debía iniciarse el 14 de julio. La 129 BI debía atacar, junto con otras unidades españolas, esta importante posición que podría blindar el territorio republicano frente al avance franquista hacia el sur. La 129 atacó la Peña desde el Este (desde Ayodar), ocupando el Dimitrov la cota 491. Pero las unidades españolas que debían apoyar el ataque no lo hicieron con la esperada energía. El mando franquista ordenó el bombardeo de la Peña, que quedó completamente incendiada.

 

Mapa general de la retirada estratégica de la 129 BI

El día 15 el mando republicano ordenó el repliegue de la 129 para volver a Cirat, al mismo tiempo que le concedía la Medalla al Valor por los méritos en el combate. Así terminó la retirada estratégica de la 129 BI por tierras de Teruel y Castellón) desde el Norte (Ejulve) hasta Sueras, ya en Castellón

El 16 de julio la brigada fue transportada al sureste de la sierra de Javalambre, con la misión de cubrir uno de los sectores de la línea XYZ en la zona de Manzanera.  Allí podrá recomponerse y, entre otras cosas, celebrar el segundo aniversario del levantamiento popular contra el golpe fascista en España.

La ofensiva franquista en el Levante (abril-julio 1938)

 

Comisión Histórica de la AABI